¡¡Domingo!!
Ya está mi nuevo artículo publicado en el espacio de Opinión de Pontevedraviva.com .
Esta vez aprovechando que muy cerquita se celebraba el día de San Benito; se me ha ocurrido la genial idea de meterme en el mundo de las creencias/religión...cada cuál que opine lo que quiera yo sigo pensando que lo mejor es creer en uno mismo...¿Y vosotros que pensáis?
Más abajo os dejo el artículo al completo.
Y aquí el enlace para leerlo Online :
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CREENCIAS
Este viernes; 21 de Marzo, se celebraba en la parroquia de
Lérez, San Benito (San Bieito); aunque dicha fiesta tiene mayor reconocimiento
el 11 de julio, donde también en las inmediaciones del Monasterio se celebra
una romería popular dedicada a este santo.
En Pontevedra es conocido como San Benito de Invierno (21 de
marzo) y San Benito de Verano (11 de julio).
Milagroso o no, es una de las romerías donde acude gran
cantidad de fieles, bien sea para celebrar la romería y honrar al santo, o como
medida desesperada de petición de deseos u necesidades que se tienen en la vida
(salud, trabajo etc.)
En este caso la historia cuenta que San Benito ayuda en la
curación de problemas en la piel (manchas y sobre todo verrugas); en el
santuario se encuentra la Imagen del Santo, rodeado de velas y aceite de oliva,
que ayudan en dicha sanación en la piel.
En este caso es S.Benito pero hay muchos más que son
conocidos por sus “actos milagrosos”.
Y está bien creer en algo, con los tiempos que corren hoy en
día, estas medidas de “ir pedir al santo” no cuestan dinero y por ir ¿qué
pierdes? tal vez se haga el “milagro”…lo malo ocurre cuando a causa de los
muchos problemas que se tienen, son muchos los que intentan resolver los suyos
aprovechando “desgracias ajenas”.
Están de moda curanderos, santuarios modernos que surgen de
la nada o del invento de algún/alguna listo/a, brujos/as estupendos etc… no
digo que no haya algún curandero de los buenos, los que realmente sí tienen
conocimientos y no hagan milagros, simplemente ayudan a “estar un poco mejor”.
La idea es que no por el hecho de que se diga que hace
milagros los hace, no debemos llevar una venda en los ojos y agarrarnos a la
primera rama del árbol; es decir, no dejemos que nos lleven a engaños; y nos
salga más caro la visita a ellos que al santuario del santo.
Tampoco es mejor aquel que deja más limosna al santo que el
otro, o el que va y no puede dejar limosna porque no tiene ni para comer; a
veces son más fieles aquellos que no dejan que los que van un día, dejan medio
sueldo u pensión y ya se piensan que el santo va a aparecer en su casa la
mañana siguiente para resolverles la vida.
La fe y las creencias están bien, en su justa medida, aunque
en mi opinión, si no eres tú el que se mueve para intentar sacar tu vida
adelante, nadie más lo va a hacer por ti por muy santo y milagroso que sea.
Mirémoslo por otro lado, aparte de que se celebre el día del
santo para honrarlo, de ahí vienen las numerosas fiestas que hay año tras año
en Galicia (cada año más y más numerosas); sirven para dar a conocer el lugar,
para promocionar el pueblo, para que los negocios de ese pueblo saquen mayores
beneficios aunque solo sea el día de fiesta…nos olvidamos de los problemas, y
ahogamos las penas entre las notas que salen de la gaita, el tambor y la
charanga de turno, tomamos pulpo y churrasco, y bebemos tinto o blanco…ahí está
el verdadero milagro, el poder que tiene todo lo que rodea el honrar al santo
para juntar a tal cantidad de gente, que conoce el sitio, conoce sus gentes y
piensa…si ellos viven así; ¿qué más pueden pedir?.
Creamos en lo que creamos, lo primero; que sea creer en
nosotros mismos, si eso pasa, entonces sí se puede salir adelante; por muchas
puertas que se te cierren siempre habrá alguna medio entornada a la que
agarrarse.
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